martes, 26 de abril de 2011

Neurofisiología de los Ganglios de la Base



Contenidos

- Introducción

- ¿Ganglios? Basales

- Errores conceptuales en Ganglios Basales

- Concepto general de la función de los Ganglios Basales

- Neuroanatomía funcional de los Ganglios Basales

- Ganglios Basales ventrales y Sistema Límbico

- Neuropsiquiatría de los Ganglios Basales

- Síndromes Hiper e Hipoquinéticos

- Parálisis Histérica y Ganglios Basales

Introducción

El Síndrome de la Guerra del Golfo es una entidad observada en algunos veteranos de esta contienda que se caracteriza, entre otros síntomas, por trastornos cognitivos.

Mediante estudios de Resonancia Magnética Funcional se ha identificado que este síndrome estaría causado por una hipotrofia de los Ganglios Basales secundaria a la exposición a pesticidas durante esta guerra.

Este hallazgo obliga a modificar un preconcepto muy frecuente en la neurobiología y la neurología y es que los Ganglios Basales están relacionados sólo con las funciones motoras. Los Ganglios Basales no sólo están relacionados con la preprogramación del movimiento sino también con el procesamiento de la Emoción y las funciones Cognitivas


¿Ganglios? Basales

Otro tema a analizar es el mismo nombre de estas estructuras, ya que su denominación lleva a un llamativo Conflicto Semántico.

Si buscamos en un Diccionario Médico veremos que la definición de Ganglio es: “Engrosamiento en el trayecto de un nervio periférico”.

Ahora bien los “Ganglios Basales” no están en el Sistema Nervioso Periférico. En realidad son núcleos grises subcorticales del diencéfalo. ¿Por qué llamarlos Ganglios?

Otra incongruencia surge cuando observamos el listado de núcleos que se incluyen en los ganglios basales:

- Cuerpo estriado (formado por el Putamen y el núcleo Caudado)

- Globo Pálido (subdividido en externo e interno)

- Núcleo Subtalámico

- Sustancia Negra

(Regla Nemotécnica: “¿SUB.ES. Negra al Globo Pálido?)

La incongruencia es anatomo-funcional. Si bien el Núcleo Subtalámico y la Sustancia Negra pertenecen funcionalmente a los circuitos conformados por el Cuerpo Estriado y el Globo Pálido, anatómicamente ambas estructuras pertenecen al Tronco Cerebral superior y NO al Diencéfalo. ¡No son ni ganglios ni “basales”!


Algunos otros errores conceptuales en los Ganglios Basales

1. ¿Existen vías descendentes directas desde los Ganglios Basales hacia la Médula Espinal? ¡NO!

Esto implica que el control motor de los ganglios basales es mediado a través de la Corteza Cerebral. Este control se lleva a cabo mediante vías ascendentes que desde los Ganglios Basales pasan por el Tálamo y llegan a la Corteza.

2. ¿Inician los Ganglios Basales el Movimiento? ¡NO!

Las estructuras relacionadas con la iniciación del movimiento son corticales

3. ¿Los Ganglios Basales forman parte de un sistema “Extrapiramidal”? ¡NO!

Habitualmente las lesiones de los ganglios basales se engloban en los llamados síndromes extrapiramidales pero esto es un error conceptual. Algunos ejemplos:

- Al núcleo Rojo se lo considera una estructura extrapiramidal y sin embargo la vía cortico-rubro-espinal nace en la misma corteza que el mal llamado haz “Piramidal” y cumple con sus mismas funciones.

¿Un haz que cumple funciones extrapiramidales y que hace relevo en una estructura extrapiramidal?

- Los Ganglios Basales controlan el movimiento a través de la corteza piramidal de manera tal que los “síntomas extrapiramidales” (temblor, rigidez, movimientos anormales) se expresan a través del haz “piramidal” (¿¿??).

Todo esto lleva a la conclusión de que si uno quiere definir a los ganglios basales en relación al sistema piramidal debería definirlos como “Pre-Piramidales”.


Ganglios Basales Ventrales y el Sistema Límbico

Las porciones ventrales de los ganglios basales forman circuitos relacionados con el Sistema Límbico (el cerebro “emocional”).

El Cuerpo Estriado Ventral (el núcleo Accumbens) recibe una vía aferente dopaminérgica procedente de un núcleo del Tronco Cerebral denominado Tegmentum Ventral. Esta vía dopaminérgica (denominada mesolímbica) se activa durante los procesos de motivación y búsqueda. Está relacionada con las recompensas naturales (sexo, comida, etc.) y con las recompensas por drogas legales (alcohol y nicotina) e ilegales (cocaína, crack, heroína, etc.).


Concepto general de la función de los Ganglios Basales

Cuando iniciamos un movimiento los Ganglios Basales “eliminan la competencia”. A través de la información que reciben de la corteza acerca del movimiento que se desea realizar, éstos inhiben (frenan) los músculos antagonistas al movimiento y liberan (desinhibiendo) los músculos relacionados con dicho movimiento.

Podríamos concluir entonces que los Ganglios Basales focalizan el Movimiento.


Neuroanatomía Funcional de los Ganglios Basales

Los Ganglios Basales, según criterios de conexión, se pueden dividir en tres grupos:

* Porteros: Son los que reciben aferencias de estructuras que no pertenecen a otro Ganglio Basal (Corteza, Tálamo, Tronco, etc.). Ejemplo: Cuerpo Estriado

* Eferentes: Son aquellos de los que salen los axones para conectarse con estructuras que NO pertenecen a los Ganglios Basales (Corteza, Tálamo, Tronco, etc.). Ejemplo: Globo Pálido interno

* De Cabotaje: Son los que reciben aferencias y eferencias solamente de otros Ganglios Basales. Ejemplo: Sustancia Negra – Núcleo Subtalámico – Globo Pálido externo.

Existen 5 circuitos que se originan en la corteza, hacen sinapsis en los Ganglios Basales para, luego de hacer sinapsis en el Tálamo, retornar a la corteza cerebral.

Sólo dos de estos circuitos tienen funciones motoras. Los otros tres están relacionados con la generación de patrones cognitivos y emocionales.

Cada uno de estos cinco circuitos está formado por dos vías en paralelo: las vías directa e indirecta.

La vía directa se inicia en la corteza límbica, hace sinapsis en el núcleo portero (cuerpo estriado) y en el núcleo eferente (Globo Pálido interno) para luego pasar por el Tálamo antes de volver hacia la corteza cerebral. Su función es liberar conductas tanto motoras como cognitivas y emocionales.

La vía indirecta nace en la neocorteza, hace sinapsis en el núcleo portero (cuerpo estriado), luego hace sinapsis en dos núcleos de cabotaje (Globo Pálido externo y el núcleo Subtalámico) para finalmente salir de los Ganglios Basales por el núcleo eferente (Globo Pálido interno) rumbo al Tálamo y la corteza cerebral. Su función es frenar conductas motoras, cognitivas y emocionales.


Síndromes Hiperquinéticos e Hipoquinéticos

En los Síndromes Hiperquinéticos (como por ejemplo la Corea, Atetosis y el Hemibalismo) los pacientes presentan una actividad muscular involuntaria.

Estos Síndromes estarían relacionados con un predominio de la descarga de la vía directa (liberadora de patrones motores) sobre la vía indirecta (inhibidora de patrones motores) por lesiones en los Ganglios basales.

El Síndrome Hipoquinético más frecuente es la Enfermedad de Parkinson. Esta enfermedad se debe a una pérdida de neuronas dopaminérgicas en la Sustancia Negra.

Estos pacientes presentan una disminución en su capacidad de iniciar movimientos y una lentitud en su realización acompañadas por rigidez y temblor de reposo.

El Parkinson se debería a un predominio de la descarga de la vía indirecta (secundario a la degeneración de las neuronas dopaminérgicas de la Sustancia negra) sobre la vía directa.


Neuropsiquiatría de los Ganglios Basales

En el Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) el paciente presenta conductas rituales y pensamientos recurrentes casi permanentes.

En este cuadro hay un aumento del metabolismo en el núcleo caudado.

Se supone que los patrones reverberantes de pensamientos en los pacientes con TOC se deberían a un predominio de la descarga de la vía directa sobre la indirecta.


Parálisis Histérica y Ganglios Basales

En pacientes con parálisis motora de origen histérico se ha hallado, en estudios funcionales de RMN, un hipoflujo en el cuerpo estriado que mejora luego que el cuadro clínico remite post tratamiento.

Este descenso metabólico del cuerpo estriado generaría una hiperactividad inhibitoria del Globo Pálido con el consecuente “freno” de los programas motores corticales. Dicho “freno” sería la causa de la falta de movimiento observada en estos pacientes.

miércoles, 13 de abril de 2011

Enseñando a nativos digitales en un mundo postmoderno



No podemos entrar marcha atrás en el futuro.” Gastón Mialaret

Como afirma Alejandro Piscitelli los “inmigrantes digitales” (o sea los docentes, los “ilegales”) debemos aprender a enseñar en forma diferente a los “nativos digitales” (o sea a nuestros alumnos) para no desaprovechar sus capacidades cognitivas.

Para nosotros, los docentes inmigrantes digitales, la informática es una segunda lengua aprendida tardíamente (y se nos nota el “acento”). Para colmo muchos docentes están aquejados de analfabetismo digital. Nos formamos ayer con una información de anteayer. Hoy formamos alumnos que ya viven en el mundo del mañana. De ahí la necesidad del reciclaje para restablecer el contacto intergeneracional y amueblar correctamente nuestra relación. No podemos, ni debemos, introducir un saber que carezca de continuidad con el saber del alumno.

El rutinario examen de conciencia pedagógico que hacemos los docentes todas las noches antes de acostarnos nos deja en claro que debemos “puentear” esta fosa digital.

Para nuestros alumnos es una lengua materna aprendida desde la cuna. Las generaciones digitales viven de, para y en la pantalla.

Si Descartes viviera en el siglo XXI afirmaría “video, TV, ergo sum”.

Existe un innegable abismo cognitivo – emocional entre aquellos que nacimos antes y después de, aproximadamente, 1984[1]. O sea antes y después de la aparición de la informática, Internet, los celulares, etc. Y este abismo tiene innegables implicancias didácticas.

Esta “mediamorfosis” supone un nuevo tipo de educación adaptada a este tipo de consumo y producción mediática.

Los docentes deberíamos apurarnos en la adaptación a esta “mediamorfosis” y en la enseñanza de los “nativos digitales” porque, como decía la protagonista de Alicia en el país de las maravillas, en un mundo en movimiento el que se queda en el mismo lugar retrocede.

Para dificultar aún más las cosas estos cambios siguen otra consigna de esta misma obra que es “La maldición de la reina de corazones”. Cuando Alicia juega al ajedrez con la Reina, ella cambia en cada movida las reglas de juego. Y en la didáctica de los alumnos postmodernos “el juego” está cambiando continuamente. Lo que funcionó ayer probablemente no funcionará hoy.

La cultura, las formas de transmisión, los criterios estéticos y hedonísticos y el régimen cognitivo son totalmente perpendiculares a la de los alumnos. Además las competencias digitales no se pueden reducir a la lectura y la escritura.

De aquí que comienza a surgir la necesidad didáctica de introducir una interfaz digital (como el Power Point) para introducir “troyanos” en los sistemas nerviosos de nuestros alumnos.

Estos “troyanos” serían “programas maliciosos” (matemáticas, historia, anatomía, etc., etc., etc.) capaces de alojarse en los depósitos de memoria de nuestros alumnos y permitir el acceso a “usuarios externos” (los docentes), a través del Power Point, con el fin de recabar información o controlar remotamente a la máquina anfitriona (el alumno). O sea “infectar” el Sistema Nervioso de nuestros alumnos con el virus del conocimiento analógico.

Según la definición de la Wikipedia un troyano no es en sí un virus, aún cuando teóricamente pueda ser distribuido y funcionar como tal. La diferencia fundamental entre un troyano y un virus consiste en su finalidad. Para que un programa sea un "troyano" sólo tiene que acceder y controlar la máquina anfitriona sin ser advertido, normalmente bajo una apariencia inocua. Al contrario que un virus, que es un huésped destructivo, el troyano no necesariamente provoca daños porque no es su objetivo.

Suele ser un programa alojado dentro de una aplicación, una imagen, un archivo de música u otro elemento de apariencia inocente, que se instala en el sistema. Una vez instalado parece realizar una función útil pero internamente realiza otras tareas de las que el usuario no es consciente, de igual forma que el Caballo de Troya que los griegos regalaron a los troyanos.

Ha aparecido una nueva clase de “bárbaros”[2], los nativos digitales “alias” criaturas visuales, que ponen en duda al libro como “carruaje” único del conocimiento y que proponen a la alfabetización digital como competencia indispensable.

Los bárbaros no leen ni les interesa los libros. Para los bárbaros leer es una experiencia que no les promete placer, peor aún no les promete ninguna sensación. Por esto una diapositiva de Power Point repleta de palabras no es una posibilidad potencialmente motivadora para un nativo digital.

Estas transformaciones cognitivas, socioculturales, etc. deben tener un impacto que modifique las estrategias didácticas que utilizamos en la docencia. Esto implica cambios en la enseñanza formal que llevan a estrategias de comunicación persuasiva que se conecten con la inteligencia emocional de los nativos digitales para “fraternizar” con su cultura y cognición de forma tal que sus alumnos pasen un “día positivo” con su “diapositiva” de Power Point.

Los nativos digitales imploran un diseño emocional que combine la funcionalidad con lo estético. En este diseño el cómo es infinitamente más persuasivo que el qué.

Los que estamos a cargo de la docencia y de las presentaciones somos inmigrantes digitales. Por el contrario la mayoría de los “consumidores” de nuestras clases con Power Point son nativos digitales. Entre ambos cortes generacionales las distancias son infinitas y las posibilidades de comunicación son terriblemente difíciles a menos que nosotros, los docentes, saltemos la brecha analógica – digital.

El célebre axioma de Heinz von Foerster “El pecado original de toda epistemología es que no vemos que no vemos” no ha perdido vigencia. No vemos que los estudiantes de hoy, los nativos digitales, NO son los aprendientes para los cuales el sistema educativo fue diseñado. NO son un auditorio que disfrutará de diapositivas de Power Point “analógicas” (atestadas de palabras).

Al terminar la secundaria un estudiante ha pasado diez mil horas jugando video juegos, diez mil horas hablando por el celular, veinte mil horas mirando la televisión y ha mandado y recibido más de doscientos mil emails o mensajes de texto.

Nuestros alumnos son hablantes nativos del lenguaje de la televisión, las computadoras, los videojuegos e Internet.

Para nosotros, los inmigrantes digitales, lo digital es una segunda lengua, y se nos nota el acento en toda nuestra actividad académica.


[1] En una increíble ¿coincidencia? 1984 es el título de una novela política de ficción distópica, escrita por George Orwell entre 1947 y 1948. La novela introdujo los conceptos del omnipresente y vigilante Gran Hermano, de la notoria habitación 101, de la ubicua policía del pensamiento y de la neolengua (o nuevahabla), en la que se reduce y se transforma el léxico con fines represivos.

El vocabulario se reduce al mínimo, hasta tal punto que palabras como malo se convierten en nobueno. De hecho, un buen hablante de neolengua es aquel que necesita menos variedad de palabras para expresar una idea (¡esto inmediatamente me hace recordar algunos mails que he recibido de mis alumnos!).

Se la considera como una de las obras cumbre de la trilogía de las antiutopías de principios del siglo XX (también clasificadas como ciencia ficción distópica), junto a la novela de 1932 Un mundo feliz, de Aldous Huxley, y Fahrenheit 451 de Ray Bradbury.

[2] Para no “herir susceptibilidades” quiero plantear aquí las múltiples acepciones de este término.

La etimología de la palabra Bárbaro procede del griego y su traducción literal es "el que balbucea". Aunque los griegos empleaban el término para referirse a personas que no hablaban el griego, existen escritos, que demuestran una apertura para concebir a los bárbaros como individuos que carecían de educación, independientemente de su lugar de nacimiento.

Pero en el ámbito rioplatense (“dixit” el diccionario): Úsase para manifestar aprobación o asentimiento. ¡Qué bárbaro!: expresa admiración y asombro.

domingo, 3 de abril de 2011

Dolor: Principios de procesamiento de señales aferentes



Abreviaturas

CRP: Campo receptivo periférico

SNC: Sistema Nervioso Central


Transducción

Los receptores sensoriales son TRANSDUCTORES ya que funcionan como una especie de “diccionario” traduciendo distintos tipos de energía (fotones, sustancias químicas, estímulos mecánicos) en el lenguaje del Sistema Nervioso que son las señales eléctricas.

Debido a la existencia de “diversos tipos de dolor” (calor, frío, presión, químico) hay “muchos tipos de nociceptores[1]” (mecano-nociceptores, termo-nociceptores, etc.) equipados con un diverso repertorio de mecanismos de transducción.

Otra característica específica de los nociceptores es que su umbral puede ser disminuido. El estímulo más poderoso para lograr dicha disminución, y así aumentar la excitabilidad de los nociceptores, es la exposición a la “sopa de protones, ácido araquidónico, serotonina, bradiquinina, etc.” que se libera durante las respuestas inflamatorias secundarias a toda lesión corporal.

Debido a esta disminución del umbral, estímulos que normalmente no son nociceptivos pueden causar dolor. Un ejemplo de esto es, después de habernos golpeado un dedo, el dolor que sentimos ante el más mínimo roce con alguna superficie.

A este fenómeno se lo conoce con el nombre de hiperalgesia.

Convergencia

Existen tres formas de que los receptores envíen sus axones hacia las neuronas de segundo orden:

1. Un receptor hace sinapsis con una única neurona de primer orden (Relación Uno a Uno). Aquí existe una alta resolución espacial.

2. Un mismo receptor se conecta con varias neuronas de primer orden simultáneamente (Divergencia). Este tipo de conexión se observa en el procesamiento de funciones complejas.

3. Varios receptores se conectan con la misma neurona de primer orden (Convergencia).

La existencia de una alta convergencia de la información de los receptores en las neuronas de segundo orden se debe a la necesidad de detectar señales débiles y amplificarlas.

La convergencia de fibras provenientes de nociceptores cutáneos con las de nociceptores viscerales en la misma población neuronal medular explica el fenómeno de Dolor Referido.

El dolor referido es el dolor por lesión en un sitio (Infarto de miocardio) que es percibido por el paciente en otro sitio (Cara interna de brazo izquierdo).

Un ejemplo de dolor referido es el paciente con una isquemia por obstrucción coronaria que consulta por dolor en la cara interna del brazo izquierdo.

¿Por qué refiere el dolor en el brazo (donde no tiene ningún tipo de patología) y no en el precordio[2] (donde debería sentir el dolor causado por la isquemia)?

Esto se debe a que los nociceptores cardíacos y de la cara interna del brazo convergen sobre las mismas neuronas espinotalámicas medulares. A lo largo de toda la vida de este paciente, cada vez que estas neuronas espinotalámicas han descargado, se ha debido a un estímulo doloroso que se ha producido en el brazo (¡es excepcional que alguien le golpeen o le pinchen el corazón!). Debido a esto el “software” central cortical se ha habituado a que cada vez que estas neuronas espinotalámicas descargan el dolor proviene del brazo.

Adaptación:

Adaptación es la propiedad de algunos receptores sensoriales que disminuyen su descarga cuando el estímulo se mantiene constante.

Cuando usted se pone la ropa interior a la mañana recibe de sus receptores de presión cutáneos (Vater Paccini) información acerca de alga le está “apretando” su cintura. Pero luego a la lo largo de todo el día usted no tiene “conciencia” de que está usando ropa interior. ¿Cuándo es el momento que vuelve a darse cuenta de que está usándola? El famoso “ahhhh” cuando se los saca por la noche.

Esto se debe a que los receptores adaptables sólo descargan ante cambios en la intensidad del estímulo. Si éste se mantiene estable los receptes se silencian y la corteza no recibe información sobre el estímulo aunque este esté estimulando a los receptores.

La Adaptación disminuye la redundancia temporal de las señales neuronales señalando sólo los cambios del estímulo (¡“economiza recursos”!).

En función de esta propiedad se puede dividir a los receptores en no adaptables y adaptables.

Los receptores de Vater Paccini (presión) son un ejemplo típico de adaptación rápida, aumentando su descarga cuando se inicia el estímulo, disminuyéndola a su nivel basal cuando el estímulo persiste sin cambios y volviendo a aumentar cuando el estímulo cesa

Los Nociceptores son una excepción entre los receptores sensoriales ya que NO presentan adaptación.

Por el contrario, si el estímulo doloroso permanece constante, los receptores de dolor no sólo no disminuyen su descarga sino que pueden incrementarla aumentando el individuo su percepción del dolor. Este es otro ejemplo de Hiperalgesia.

Inhibición Lateral

Existen mecanismos laterales (horizontales) de procesamiento en todos los niveles del Sistema Nervioso.

Un principio general de la fisiología sensorial es que la mayoría de las neuronas aferentes están mejor adaptadas para detectar CAMBIOS y CONTRASTES.

Las neuronas, a diferentes niveles de la vía aferente, envían colaterales inhibitorias hacia las células vecinas de su mismo nivel.

De esta manera ante un estímulo, el grupo de neuronas que reciben información aferente de los receptores más poderosamente activados (habitualmente los situados en la zona central del estímulo) inhibirán a las neuronas que reciben información de los receptores que han sido más débilmente activados (que generalmente son los receptores en la periferia de la zona estimulada) aumentando así los contrastes de la percepción sensorial.

Esto es de gran importancia ya que en un mundo lleno de constantes uniformes es más eficiente responder a cambios y detectar contrastes (¡Conductualmente es el cambio lo que tiene mayor significado!).

El mecanismo de inhibición lateral también explica porqué cuando nos duele un diente, si comprimimos la piel y la mucosa gingival circundante dicho, dicho dolor disminuye. Pero, cuando dejamos de comprimir, el dolor reaparece.

Lo que sucede es que la descarga de las neuronas medulares, generada por la estimulación de los nociceptores provenientes de la muela cariada, es bloqueada por inhibición colateral. Dicha inhibición colateral proviene de la estimulación aferente generada por la compresión de la piel y la mucosa gingival.

Vías Etiquetadas

El “Principio” de la Vía Etiquetada se basa en el hecho de que la activación de una población particular de neuronas (como por ejemplo las fibras aferentes de los nociceptores del dedo pulgar) es siempre interpretada por el SNC como un estímulo doloroso proveniente del dedo pulgar. Y lo mismo sucede con las fibras aferentes aditivas, visuales, gustativas, etc.

Esto es así porque los receptores no sólo son específicos con respecto al estímulo sino también con respecto a las neuronas de primero y segundo orden con las que se comunican con regiones específicas del SNC.

Es en este “relevo” ordenado desde el Receptor hasta las neuronas centrales que se forma una vía “etiquetada”.

Plan anatómico común

Los axones aferentes sensoriales cruzan la línea media en su camino hacia el Tálamo. Esta decusación pretalámica puede ser completa o incompleta (como por ejemplo en la vía visual).

Los axones de las neuronas ganglionares entran al SNC y en forma directa (Visión) o luego de una sinapsis o varias sinapsis (Gusto, Somatosensorial, Audición) llegan al Tálamo a través de tractos altamente mielinizados que transmiten la información sensorial con gran rapidez.

En los núcleos talámicos las neuronas están segregadas por función (tacto, dolor, etc.).

Los axones talámicos se proyectan a la Corteza Sensorial Primaria.

Los axones de la Corteza Sensorial Primaria envían información a la Corteza Asociativa.

Dolor (Sistema Anterolateral)

Los axones finos provenientes de los Termo y Mecanonociceptores hacen sinapsis en la médula con neuronas cuyos axones cruzan la línea media y luego ascienden por el cordón anterolateral medular.

Estos axones pueden formar alguna de las siguientes tres vías que transmiten el dolor:

Espinoreticular: Finaliza en la Formación Reticulada Bulbo-Protuberancial. Procesa las respuestas emocionales ante el dolor.

Espinomesencefálico: Finaliza en los Tubérculos Cuadrigéminos Superiores y en la Sustancia Gris Periacueductal. Al activar a la Sustancia Gris Periacueductal genera analgesia. Por esto se considera que esta vía se encarga del Control Central del Dolor.

Espinotalámico: Finaliza en neuronas específicas del núcleo talámico Ventro-postero-lateral y en los núcleos intralaminares.

El sistema Trigéminotalámico (información de la cara) finaliza en el núcleo talámico Ventro-postero-medial.

Ambos núcleos proyectan hacia la corteza Parietal.

Esta vía se encarga de procesar el tacto grueso y la información Mecano y Termo-nociceptiva.

Proyección Topográfica, Mapas y Organización Somatotópica

Los sistemas Sensoriales se proyectan con un orden TOPOGRÁFICO estricto. Neuronas posicionadas una al lado de la otra se conectan en el próximo relevo con neuronas posicionadas de la misma manera, o sea en el mismo orden.

Debido a los principios de Vía “Etiquetada” y Proyección Topográfica, cada neurona sensorial es específica para la:

- Modalidad del estímulo (vía etiquetada): Cada neurona procesa información de un único tipo de modalidad sensorial (auditiva, visual, gustativa, etc.)

- Localización del estímulo (proyección topográfica): Cada neurona procesa información de un único tipo de modalidad sensorial de una única localización (tacto del extremo del dedo índice derecho, dolor de la región plantar izquierda, etc.).

Esto explica la existencia de múltiples “mapas” de la “superficie” de recepción sensorial a diferentes niveles de las vías aferentes (Núcleo Coclear: 3 mapas de tonalidades auditivas, Tálamo: 6 mapas de la retina, Corteza: múltiples mapas sensoriales del cuerpo, etc.).

En estos mapas algunas representaciones corticales de ciertas porciones de la periferia están magnificadas.

Esto se debe a que la representación central de las diferentes regiones periféricas es proporcional a la densidad de receptores en esa región del cuerpo y no a su tamaño.

Un ejemplo de esto es la distribución desigual de los receptores somatosensoriales. Las puntas de los dedos, labios y lengua poseen una alta densidad de receptores con campos receptivos periféricos (CRP) pequeños. Gran parte de la corteza parietal está relacionada con la información proveniente de los dedos, labios y lengua.

En el Sistema Lemniscal Medial, a nivel de sus relevos en los núcleos Gracilis y Cuenatus y en el Tálamo (núcleo VPL) así como también en la corteza Somatosensorial, existe una representación topográfica de la superficie corporal denominada Homúnculo sensorial. Dicho Homúnculo (que significa “pequeño hombre”) es un mapa corporal de todos los receptores sensoriales de esta vía.

Estos “Homúnculos” están cada vez más distorsionados en su representación corporal a medida que ascendemos en la vía sensorial.

Los 4 mapas que se observan en la corteza SI están distorsionados por el agrandamiento de los dedos (¡tienen un tamaño 100 veces superior al del tronco!) y de los labios.

Organización Jerárquica

A medida que ascendemos en una vía sensorial, se procesan características de mayor complejidad (de mayor “jerarquía”) del estímulo.

En los niveles inferiores de una vía se procesa la sensación: algo está estimulando a mis receptores.

A nivel de la neocorteza sensorial primaria (segundo nivel de “jerarquía) se procesa la percepción: lo que está estimulando a mis receptores es redondo, duro, frío, redondo, etc.

A nivel de la corteza asociativa polimodal (tercer nivel de “jerarquía) se procesa la cognición: lo que está estimulando a mis receptores es una moneda.

A nivel de la corteza límbica (el nivel jerárquico más alto) se procesan las respuestas emocionales ante el estímulo sensorial: “¡moneda trucha de porquería que me rebota la máquina del colectivo!”.

Procesamiento en Paralelo:

Vías “paralelas” mantienen una “división del trabajo” desde los receptores periféricos hasta la corteza. Estas vías en paralelo se encargan de procesar aspectos funcionales diferentes del estímulo sensorial.

El dolor presenta tres tipos de receptores diferentes:

- Mecanonociceptores: Transducen el dolor rápido y bien localizado, fácilmente tolerado. Es el dolor luego de un “pinchazo”

- Nociceptores Polimodales: Captan los estímulos mecánicos intensos, químicos y el calor. Generan un dolor lento, mal localizado y mal tolerado con un importante componente afectivo. Es el dolor quemante tardío crónico.

- Nociceptores Viscerales: Generan un dolor mal localizado y mal tolerado con un importante componente afectivo.

Tres vías diferentes transmiten el dolor:

- Espino-Reticular: Procesa las respuestas emocionales ante la percepción del dolor

- Espino-Mesencefálico: Activa las vías analgésicas (inhibe el dolor) ante la activación de las neuronas espinales encargadas de procesar el dolor.

- Espino-Talámico: Procesa la información nociceptiva propiamente dicha.

Este es un ejemplo típico de Procesamiento en Paralelo: diferentes vías que se encargan de procesar diferentes aspectos de un mismo estímulo sensorial.

Organización Columnar:

Las neuronas de las áreas corticales sensoriales están ordenadas en columnas. Las neuronas de estas columnas presentan similitudes funcionales (modalidad, localización del receptor, etc.).

La organización columnar implica que las neuronas de una misma columna responden al mismo tipo de estímulo aplicado en la misma localización del cuerpo (respuesta de modalidad y localización específica).

Matiz Afectivo Emocional

A la codificación neuronal por patrones de frecuencia espaciotemporales de descarga se debe sumar el “matizafectivo-emocional que agrega las características de placer / displacer al estímulo sensorial.

Existen múltiples ejemplos de la importancia de este “matiz” en la percepción sensorial:

- Los pacientes con severas lesiones del Lóbulo Frontal “sienten” dolor pero no lo “perciben” como displacentero.

- La diferencia cualitativa en la percepción del dolor durante el trabajo de parto, mucho más intenso que el dolor crónico por infiltración neoplásica de plexos nerviosos, pero mucho mejor tolerado que este último.

- Los estímulos que pueden resultar “eróticos” según las circunstancias en que se producen

- El umbral al dolor cambia según el componente afectivo del estímulo nociceptivo. Este componente emocional estaría mediado por la información transmitida por el Espino-Reticular.

Control Central

La Corteza Cerebral NO es un receptor pasivo de la información aferente. Mediante sistemas descendentes de control central escoge aquellos eventos sensoriales que requieren de una atención inmediata. Al hacer esto optimiza y MODIFICA la percepción.

El Control Central forma parte de los Sistemas Atencionales que recortan la cantidad de información que el SNC necesita procesar simultáneamente. Esto asegura que los estímulos irrelevantes no ocupen los limitados recursos de procesamiento cortical.

Las vías descendentes que forman parte de los sistemas del control central se proyectan desde las cortezas sensoriales hacia la médula, los núcleos de relevo del Tronco Cerebral y el Tálamo.

Las estructuras relacionadas con el Control Central del Dolor reciben información nociceptiva mediante el haz Espino-Mesencefálico que hace sinapsis en la Sustancia Gris Periacueductal (SGP).

La SGP envía una proyección hacia los núcleos serotoninérgicos del Rafe. Estos núcleos se conectan, mediante el haz Rafeespinal, en forma presináptica con los axones aferentes que traen información desde los nociceptores. Esta conexión es inhibitoria y libera neurotransmisores morfinosímiles (analgésicos).

La Percepción es una Abstracción y no una réplica de la Realidad: ¡La “decepción” de la Percepción!

O sea que la percepción NO es una “fotocopia” del estímulo. Esta afirmación se basa en las diferentes características del procesamiento de las señales aferentes que hemos analizado hasta el momento:

- El Control Central modifica ciertas características de la Sensación haciéndola diferente de la Percepción (entendiendo a la Sensación como la detección de un estímulo y a la Percepción como la interpretación de dicho evento).

- Otro motivo por el cual podemos pensar en que nuestras percepciones son una versión “editada” de las sensaciones son las propiedades de Adaptación e Inhibición Lateral, que si bien optimizan el procesamiento aferente, “distorsionan” la sensación original.

- Finalmente varios receptores sensoriales tienen ciertas “lagunas” en su especificidad por el estímulo (Cierre sus ojos y apriete su Globo Ocular: ¡Un estímulo “táctil”, en ausencia de estímulos visuales, lo hará ver “lucecitas”!).

Percepción Conciente

Dos conceptos a tener en cuenta en el procesamiento aferente son que un estímulo sensorial puede:

- No ser percibido concientemente y sin embargo igualmente generar cambios conductuales. ¡Esto significa que muchas áreas neuronales responden a estímulos de los cuales no somos concientes!

- “Viajar” por la vía aferente a lo largo de varios “niveles” sin ser percibido concientemente hasta que no llega a la corteza asociativa. ¡Esto significa que somos “inconscientes” de una gran parte de nuestra actividad cerebral!

Es interesante destacar que hay vías aferentes específicas para la percepción inconsciente de ciertos tipos de estímulos. Un ejemplo es la vía visual.

¡Existen pacientes con una hemianopsia[3] que son capaces de discriminar diferentes expresiones emocionales faciales en su hemicampo visual ciego!

Se ha visto que si se presentan caras con distintas expresiones faciales en su hemicampo ciego, el complejo amigdalino aumenta la descarga mientras el paciente “adivina” la expresión emocional. ¡Simultáneamente el paciente niega tener una percepción visual en su campo ciego!

Diferentes trabajos han mostrado que esta capacidad, denominada mirada a ciegas” en la bibliografía anglosajona (“Blindsight”), sería mediada por una vía que va desde los Tubérculos Cuadrigéminos Superiores hacia el Núcleo Pulvinar y que finaliza en el Complejo Amigdalino. Esta vía subcortical se encargaría de la discriminación visual inconsciente de estímulos emocionalesno vistos” por la corteza visual estriada “conciente”.

Para concluir se puede decir que existirían dos vías “paralelas” de procesamiento visual. Una que depende de la corteza occipital para la visión conciente y otra que finaliza en el “Sistema Límbico” (un verdadero “rompecabezas” conceptual de la neurobiología) para las capacidades visuales inconscientes.

Estas experiencias parecieran darle razón a las teorías freudianas en el sentido de que los estímulos sensoriales pueden afectar la conducta sin ser concientemente percibidos. ¡También parecerían confirmar la afirmación de Kant de no confiar en nuestros propios sentidos!

Plasticidad:

La gigantesca red que conforma al Sistema Nervioso está reorganizándose a si misma sin cesar. Por lo que podemos considerar al SN como una entidad continuamente CAMBIANTE. Una alteración en un estímulo relevante será el “gatillo”de una reorganización de los circuitos y mapas centrales.

Pero la plasticidad del Sistema Nervioso tiene también un “lado oscuro”. Un ejemplo de dicho “lado oscuro” es la “catastrófica” reorganización cortical que puede seguir a una lesión en los núcleos talámicos de la vía nociceptiva causando un cuadro de Dolor Central de terrible intensidad y de muy difícil tratamiento.

Por todo esto la imagen “estática” de los sistemas aferentes como cableados “fijos” está siendo reemplazada en la actualidad por una en la cual el contexto del estímulo es clave para generar cambios plásticos adaptativos neuronales.


[1] Receptores de dolor

[2] Parte central del pecho que queda por delante del corazón.

[3] La hemianopsia es una pérdida de visión en una mitad del campo visual por una lesión retroquiasmática